En el Silencio de la noche me confieso.

En el silencio de la noche me confieso

Por: Sulmy Rodriguez

Tengo este espacio y a través de él diré todo lo que pienso y siento. Desde lo más profundo de mi ser, las verdades ocultas que el él se encuentran y que ustedes jamás imaginarían.

Sì, en el silencio de la noche aparecen mis reflexiones.

Diré que soy un “ser humano” capaz de autocríticarme y de auto-evaluarme de todo o casi todo lo que pienso y siento. 

Es increíble que el hombre siendo el más inteligente de los animales, sea además de ser inteligente, capaz de planear  su propio fin,  y me refiero a que es capaz de destruir todo o casi todo lo que tiene a su alrededor,  muy consiente de que lo está haciendo.

Reflexionando recordé que un día  rumbo a mi casa  se me ocurrió comer en el autobus, llevaba un hambre espantosa, después de terminar, no tenía dónde echar la basura, la escondí en mi bolso, pero ocurrió que me dió  un poco de pena, (pena me hubiera dado votarla sabiendo que no debo hacerlo) la boté sin que nadie me viera -dije- y recordando lo que sé, que es malo botar la basura en cualquier lugar, sentí un pequeño cargo de consciencia, digo pequeño, por que al llegar a la casa se me olvido. 

¿Por qué? Sé que algo está mal y lo sigo haciendo. 

Trataré de explicar el por qué lo hice con el ejemplo de la basura y más adelante con una relación personal.

En mi caso, he reflexionado que debo aportar un granito de arena ayudando al medio ambiente, no botando la basura donde no debo. 

Lo pienso, una y otra vez y me canso.  Allá cuando, vuelve la costumbre de comer en la calle. Sucede lo mismo.

Otro ejemplo: cuándo hay alguien tras de mi, no dejó de preguntarme ¿me conviene ésta persona? 

Entiendo que nadie es perfecto, que hay infinidad de maneras de ser, como seres “humanos”y culturas en el mundo.

En este sentido está muy claro lo que intento decir. No es posible comprender la infinidad de pensamientos de cada ser (humano), no es posible conocer cada experiencia, ni el por qué le lleva a actuar de determinadas maneras.

Como parte de la sociedad salvadoreña, tengo ciertas costumbres que me identifican, ciertos criterios y valores  como: la solidaridad y la tolerancia. 

Prosiguiendo con el ejemplo anterior, tomo por sentado, de que la sociedad (las salvadoreñas y los salvadoreños) tenemos esos valores
 (la solidaridad y tolerancia). No debería hacerlo ya que no es bueno generalizar, pero lo haré para lograr que me comprendan.

A partir de ello y siguiendo con mi experiencia hay ciertas cosas que yo no aprobaría en un hombre, aunque "me guste demaciado” y que la adopción de ciertas costumbres como el vicio al alcohol, haya arraigado muy, pero muy profunda mente en su ser.

Menos aprobaría que intente menospreciarme y que se sienta el  todo poderoso. Si lo hace, desde ahí, ya comenzo mal la relación; otra característica que no toleraría es que intente agredir mi persona tanto física como psicològicamente. 

Conociendo que los hombres hoy en día no tienen la más mínima consideración hacia la mujer, y que toman el vicio por religión, la cosa se vuelve un tanto tormentosa, y se vuelve un caos de pensamientos y sentimientos, entre qué es lo que deseo y cuáles son mis opciones.

En realidad no hay muchas opciones para una mujer,  solo existen tres posibles opciones -vea usted.

1- Hombre vicioso 
2- Hombre machista 
3- Hombre mujeriego.

Y por si fuera poco aveces vienen en paquete del dos por uno, vicioso o mujeriegos o machistas y viciosos...etc.

Si en tal caso, elijo al vicioso, tendré por seguro que soportar que se vaya de rumba con sus amigotes y en esas, hasta consigue la usurpadora, no mejor no, mejor elijo al que me menosprecia, es decir al machista - seguro que terminaré suicidandome o en la lista de feminicidios…noooo! – Mujeriego, tendrè que ser la esposa resignada o la amante desgraciada. 

¡¡Por Dios!! pero tiene que haber algo, algo bueno en esta vida. 

Pero habemos mujeres que sabiendo a qué nos atenemos neciamos con tipos asi, creo que al final solo hay una palabra que describe
nuestro proceder: RESIGNACIÓN y el porque a veces botamos la basura en la calle.